[Análisis] In Rays of the Light para Nintendo Switch

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[Análisis] In Rays of the Light para Nintendo Switch

Sometimes You ha querido traer a Nintendo Switch el remake de un juego que apareció en 2012 bajo el nombre de The Light, con esta obra intimista que nos llega en 2021 como In Rays of the Light. Vamos a ver lo que nos ofrece.

Mensajes de la humanidad

In Rays of the Light es una de esas obras intimistas y metafóricas que no necesita contarnos nada antes de empezar para arroparnos en su tónica y provocarnos diferentes sensaciones. Nos ponemos en la piel de un personaje en primera persona que aparece en un edificio en ruinas y del que, tal y como nuestra intuición nos hará saber, debemos salir y conocer qué ha ocurrido.

Y es que estamos ante un walking simulator en el que debemos investigar pistas y resolver pequeños puzles para poder obtener respuestas. Apenas con un botón y un pequeño inventario que no va más allá de una palanca, una linterna y un mechero, iremos caminando por diferentes zonas del edificio y de sus alrededores. Aunque a veces el apuntado y el movimiento no son todo lo precisos que cabría esperar, tampoco es algo que arruine la experiencia.

No voy a contar demasiados detalles de la historia, pero el juego se centra en algún lugar de una Rusia de un futuro no tan lejano que ha sufrido un desastre a gran escala. Aquí, solos, debemos descubrir los detalles de un ambiente que se mueve entre lo escalofriante y lo desolado, dependiendo del punto en el que estemos. Todo con un mensaje profundo y diferentes situaciones que pueden hacernos pensar qué ha ocurrido y por qué.

Jugar con las sensaciones

Algo que hace bastante bien In Rays of the Light es jugar con las sensaciones. Y es que a la dinámica sencilla de un walking simulator y unos puzles que no dan demasiados quebraderos de cabeza, se le añade una armonía de sensaciones y recursos que deja un buen sabor de boca.

Y es que In Rays of the Light sabe cómo crear expectación, darnos momentos de relax, crear incomodidad e incluso cierta sensación de terror. Combina muy bien ciertas melodías sobrias de piano en los momentos justos, dejando espacio para un sonido ambiente libre de música en muchas otras ocasiones y una estética post-apocalíptica que cierra esta armonía de la que hablo.

En el aspecto gráfico destacan sus juegos de iluminación. La idea artística es buena, aunque las texturas de algunos elementos y un framerate que no siempre se mantiene estable podrían haberse pulido más.

No son muchas las notas y elementos que debemos leer o escuchar, pero sí debo recalcar que estos textos y subtítulos solo están en inglés, alemán o ruso, es decir, no viene traducido al español.

Lo que dura un recuerdo…

In Rays of the Light es un juego bastante corto. Pasar su trama me ha llevado algo más de tres horas aunque, eso sí, cuenta con dos finales, por lo que podríamos añadirle un poco más.

En este caso no cuenta con ningún otro aliciente. Es cierto que los walking simulator no suelen destacar por su duración, pero deja la sensación de que con sus ideas y su forma de crear la ambientación, el juego podría haberse extendido un poco más.

En cualquier caso, que sea una experiencia tan corta no debe echaros para atrás, ya que las horas que ofrece nos mantendrán centrados en él y en esas sensaciones que sabe crear.

Conclusión

In Rays of the Light es una de esas obras intimistas que saben crear diferentes sensaciones en el jugador llevándole donde quiere. La armonía entre lo que cuenta y cómo lo refleja, principalmente a través del sonido, deja un buen sabor de boca que acaba sabiendo a poco por su corta duración. Si buscáis una experiencia de este tipo, In Rays of the Light ya se encuentra disponible en la eShop de Nintendo Switch por 7,99 €. Necesitaréis un total de 1,3 GB en vuestra memoria para instalarlo.

7.5

[Análisis] In Rays of the Light para Nintendo Switch

Puntuación Nintenderos: Recomendado

  • Historia:
  • Jugabilidad:
  • Gráficos:
  • Sonido:
  • Duración:
  • Multijugador:
Destaca en:
  • Su ambientación y las sensaciones que sabe crear.
  • Nos mantiene con ganas de saber qué ha sucedido.
Flojea en:
  • Muy corto.
  • Las texturas y algunos "tironcitos" ocasionales que podrían haberse pulido mejor.