[Análisis] Digimon Story Cyber Sleuth: Complete Edition para Nintendo Switch

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[Análisis] Digimon Story Cyber Sleuth: Complete Edition para Nintendo Switch

Muchas veces, cuando hacemos alusión a Digimon, aquella saga que nació allá por 1997 como una alternativa al clásico Tamagotchi, las siempre odiosas comparaciones no tardan en salir a flote con respecto a otra famosa franquicia de monstruos de bolsillo que también lleva años conquistando nuestros corazones.

No obstante, desde mi punto de vista, dicho símil no podría estar más desencaminado, ya que fuera de su envoltorio de criaturas que combaten unas con las otras, ambas son franquicias cuyos núcleos difieren muchísimo entre sí, y es que mientras que Pokémon ha ido evolucionando siempre en línea recta con una fórmula muy definida y un mismo protagonista para su serie animada a la vez que priorizaba siempre simpatizar con todos los públicos sin importar si fuesen jóvenes o veteranos, Digimon tiró por un camino bastante diferente en su desarrollo, con temporadas de su serie de animación que no tenían demasiados nexos de unión las unas respecto a las otras, juegos pertenecientes a toda clase de géneros y, por lo general, el deseo y objetivo final de madurar e intentar centrarse en un público más adulto.

De esa forma, el título que hoy os venimos a analizar, distribuido en España por cortesía de Bandai Namco Entertainment, sigue esa misma línea de pensamiento, trayendo por primera vez a Nintendo Switch una compilación de dos juegos que en el pasado fueron lanzados para otras plataformas y que ahora reciben una segunda vida debido a su status de joyas ocultas del género.

Así es, hoy venimos a hablaros de Digimon Story Cyber Sleuth: Complete Edition, título que en su día tuvo un recibimiento algo tibio por parte de la prensa pero que conquistó a los usuarios. ¿Merece la pena darle una oportunidad? ¿Aporta algo interesante? ¡En el siguiente análisis esperamos hacerle justicia, así que sumérgete con nosotros en el mundo digital, ¡que empezamos!

¿Hacker o detective? Dos caras del mismo conflicto

Empecemos por el principio. Al iniciar el título lo primero de lo que nos percataremos es de la cálida bienvenida al mundo digital que recibiremos por parte de una joven llamada Mirei Mikagura (a quien ya conoceréis si sois adeptos a la franquicia), la cual nos preguntará cuál de las dos historias que contiene el título queremos experimentar primero.

Por supuesto, podremos elegir cualquiera de las dos aventuras que queramos (compartiendo ambas fichero de guardado, ya que al completar una obtendremos recompensas para la otra), sin embargo, desde este análisis os recomendamos empezar primero con Cyber Sleuth (la aventura de la derecha) y dejar para el final Hacker’s Memory, ya que aunque ambas campañas puedan jugarse de forma completamente independiente, la última mencionada fue lanzada posteriormente como un título acompañante y, por ende, contiene detalles de interés que pueden destriparnos la historia de la aventura original.

También, como cabe destacar, no necesitáis ningún conocimiento adicional de la franquicia para disfrutar de este título, ya que se preocupa por introducir los conceptos más básicos de la misma desde un primer momento para que cualquiera pueda disfrutar sin importar sus conocimientos al respecto.

Tras estos pequeños incisos, empezaremos introduciéndoos en el mundo que propone el juego. En concreto, nuestra historia se situará en el EDEN, una especie de mundo virtual de gran relevancia en la sociedad futurista del mundo del título, tanta, que es una obligación legal que los avatares de las personas que lo usan sean idénticos a cómo lucen en el mundo real. De esa forma, en dicho universo existirán los hackers, personas convictas que actúan tanto en solitario como en grupos y que se valen para hacer sus fechorías en el mundo virtual de la existencia de unos virus representados en forma de monstruos que, como habréis adivinado, son los Digimon.

Nuestra primera historia (la que se titula Cyber Sleuth a secas) seguirá a un joven (cuyo sexo y nombre podremos elegir) que se ve atrapado entre el EDEN y el mundo real por un incidente con uno de estos Digimon, lo que hará que se vea obligado a unirse a una rocambolesca agencia de detectives para resolver crímenes relacionados con el mundo digital y recuperar su cuerpo, todo eso a la vez que va descubriendo lo que oculta tras de sí el enigmático mundo en el que se encuentra.

Por otra parte, si decidimos empezar con Hacker’s Memory, se nos privará de la opción de elegir nuestro sexo (ya que tomaremos el control de un personaje con una personalidad algo más definida) y encarnaremos a un joven que se ve envuelto en un percal de proporciones bíblicas cuando un grupo de hackers roban su cuenta personal (algo tan importante en dicha sociedad como puede ser el DNI en la nuestra), y acaba siendo repudiado por todo el mundo, viéndose incluso obligado a abandonar la escuela tras dicho incidente. No obstante, gracias a las pocas amistades que le quedan consigue seguirle la pista al supuesto culpable de la suplantación de su identidad, así que tomará la decisión de recuperarla y limpiar su nombre cueste lo que cueste.

Como os mencionamos anteriormente, ambas historias se irán entrelazando durante la aventura, haciéndonos descubrir nuevos secretos de los personajes que en ellas aparecen, así como nuevas facetas de los conflictos que se le presentan a nuestros protagonistas. De esa forma, aunque cada título recicle bastantes elementos del otro como pueden ser escenarios y mecánicas, no nos aburriremos para nada al poder vivir, como quien dice, los dos lados de una misma historia que está sucediendo alternativamente.

Por supuesto, aunque hemos evitado entrar en demasiados detalles con lo arriba descrito para no chafaros ninguna sorpresa, sobra decir que en la historia no faltarán temas de lo más adultos que incluirán, entre otros, enfermedades de origen desconocido, personajes que no son lo que aparentan a primera vista, experimentos ilegales… Todo ello aderezado con una franquicia del renombre de la de los monstruos digitales. Suena interesante, y creednos cuando os decimos que lo es.

No cambies lo que ya funciona

Hablando de la jugabilidad, lo primero a aclarar por nuestra parte sería que la dinámica de las batallas presentes en el título será, como ya es costumbre, la de los combates por turnos. A pesar de esto, encontraremos alguna vuelta de tuerca de lo más bien agradecida que pasaremos a explicaros a continuación.

Como habréis podido suponer, combatiremos haciendo uso de nuestros Digimon (de los cuales encontraremos gran cantidad, más de 300 entre ambos títulos, todos provenientes de las temporadas más populares de la serie, pudiendo capturar además un número sin límite de ellos mediante una curiosa mecánica de escaneo).

De tal forma, cada Digimon, todos con su propio tipo y equipamiento específico que podremos personalizar, contará con la posibilidad de usar un ataque básico, defenderse o emplear habilidades que irá aprendiendo conforme suba de nivel (en total, cada uno podrá aprender hasta 20 habilidades simultáneamente que podremos usar en nuestros combates, teniendo cada habilidad efectos de lo más diversos que irán desde realizar un ataque en rango hasta curar a nuestros aliados). Además de lo descrito y por obvio que resulte, conforme vayan subiendo de nivel podremos evolucionar a la gran mayoría para subir sus atributos y volverlos cada vez más poderosos.

Así, la mecánica que usará el juego para determinar quién ataca en cada momento se tratará de una línea de tiempo que aparece en la parte derecha de la pantalla e indicará los siguientes turnos, haciendo que podamos planificar nuestra estrategia con la suficiente antelación y de la forma más conveniente posible.

Por si fuera poco, podremos usar objetos y realizar cambios en nuestra plantilla actual (tendremos en el campo de batalla hasta a 3 Digimon al mismo tiempo), además de visitar el DigiLab, una suerte de Centro Pokémon donde podremos revitalizar a nuestro equipo instantáneamente para seguir dando guerra allá por donde vayamos. Por otra parte, algo la mar de interesante será la capacidad de poner las batallas en modo automático, algo que nos permitirá superar sin mayor demora ni tedio alguno los encuentros que puedan resultarnos más repetitivos.

Otra cosa que es importante destacar es que la mayor parte del juego tendrá lugar en mazmorras no demasiado inspiradas en las que podremos hablar con NPC’s (así como sacarles información), resolver sencillos puzzles y enzarzarnos en batallas contra criaturas digitales mediante encuentros aleatorios (algo común en el género que, por suerte o por desgracia, también se encuentra en estos títulos).

El juego del que os hablamos tampoco es ajeno a las misiones secundarias, las cuales son interesantes y variadas, no tanto por su diversidad, sino por lo bien escritas que están, ya que nos llevarán a ejecutar aventuras que irán desde ayudar a un club escolar hasta rescatar a un doctor que se encuentra en aprietos. Ahí es nada.

Además de todo esto, también conviene hablar del modo en línea, el cual no hemos podido disfrutar demasiado debido a la falta de una comunidad activa con la que jugar, pero que sigue con las dinámicas de los combates por turnos previamente descritos. Así, en Cyber Sleuth solo podremos enfrentarnos a jugadores al azar, mientras que en Hacker’s Memory podremos enfrentarnos a amigos que tengan el juego si así lo deseamos.

Sin embargo, y a pesar de no haberlos encontrado en esta ocasión, queremos advertiros de que en las entregas originales para otras plataformas una queja bastante usual era la existencia de bots que chafaban la experiencia, algo que se espera que no ocurra en esta versión de Nintendo Switch pero que es mejor advertir con antelación para aquellos que decidan tomar la iniciativa y sumergirse en el apartado más competitivo del título.

Por último, si queréis echarle un vistazo en vídeo a lo que os hemos descrito anteriormente, os dejamos a continuación con un vídeo de la distribuidora en el que enseñan, con un poco menos de profundidad, lo que aquí os hemos explicado:

Sumergiéndonos en el mundo digital

Ha llegado la hora de hablar de otro de los puntos más importantes de toda aventura de rol: su apartado artístico. Ahondando en él, podemos decir sin temor a equivocarnos que el de ambos juegos es soberbio, con escenarios cibernéticos de lo más coloridos y diseños de personajes a cargo de Suzuhito Yasuda, un ilustrador de prestigio conocido principalmente por haber trabajado en Shin Megami Tensei: Devil Survivor además de ser el pincel detrás de las novelas ligeras de Danmachi.

Así, en el título no faltarán las cinemáticas, las cuales serán bastante usuales y resultarán ser la forma de contar la historia junto a numerosos diálogos (algunos de ellos bastante extensos) que, además de no poder ser saltados, vendrán en un perfecto inglés.

En cuanto al apartado técnico, os podemos asegurar que es un título que luce de fábula en la consola, corriendo a 60 fotogramas por segundo y con una resolución de 720p que resulta más que digna para la experiencia propuesta. Sí que es verdad que en algunas zonas hemos notado ciertas ralentizaciones debido a la carga gráfica, pero no ha sido para nada algo alarmante o que empañase nuestra experiencia en lo más mínimo, así que podéis respirar tranquilos.

Para terminar, hablando del apartado sonoro, podemos afirmar que aunque no sea demasiado variado (el tema principal se escucha bastantes veces con diferentes reimaginaciones) es sin lugar a dudas notorio, con temas que realzan bastante bien la temática cibernética del título, gracias en gran parte a que tras la misma se encuentra Masafumi Takada, creativo conocido por ser el compositor de franquicias del renombre de Danganronpa, así como colaborador habitual de SUDA51 que aquí presenta un trabajo muy en su línea que acaba siendo más que digno. Para que os hagáis una idea de lo que os hablamos, os dejamos con uno de los temas presentes en el título a continuación:

Conclusión

Por separado, los juegos que componen Digimon Story Cyber Sleuth: Complete Edition son títulos de notable alto, con decenas de horas de diversión asegurada, una trama interesante y adulta y un sistema de combate que, aunque resulte clásico, es complejo y adictivo. No obstante, cuando son combinados como ha ocurrido en el lanzamiento que hoy os hemos expuesto, son sin lugar a dudas una obra de sobresaliente, y es lo que hoy os hemos querido reflejar con nuestro análisis.

Sí, puede que su diseño de niveles no esté demasiado inspirado, o que su modo en línea tenga algunas carencias, pero no obstante, son juegos que apoyándose el uno en el otro logran suplir sus debilidades y crear una experiencia fantástica a la par que compleja, y por ello, se tratan de títulos que merecen la pena para todo amante del rol japonés. Así que solo queda una pregunta por responder, ¿os apuntáis a sumergiros junto a nosotros en el mundo digital una vez más?

Digimon Cyber Sleuth: Complete Edition ya se encuentra disponible tanto en formato digital a través de la eShop de Nintendo Switch como en formato físico a un precio de 59,99€, con una duración de 40 a 80 horas, contando con textos en inglés, voces en japonés y ocupando un espacio total de 5339,35 MB.

Como nota final, queremos destacar que esta entrega, al ser algo así como la versión definitiva del título, contiene todo el contenido adicional de pago lanzado en las versiones originales, así que no tendréis que preocuparos por gastar más de lo debido en conseguir cualquier tipo de criatura digital que os falte. Está todo incluido.

9.0

[Análisis] Digimon Story Cyber Sleuth: Complete Edition para Nintendo Switch

Puntuación Nintenderos: Imprescindible

  • Historia:
  • Jugabilidad:
  • Gráficos:
  • Sonido:
  • Duración:
  • Multijugador:
Destaca en:
  • Dos historias geniales entrelazadas en un mismo título por primera vez.
  • Artísticamente fantástico, contando con diseños de Suzuhito Yasuda.
  • Gran cantidad de Digimon a coleccionar con un sistema de batalla clásico pero muy sólido.
Flojea en:
  • El diseño de las mazmorras no se siente demasiado inspirado.
  • El modo en línea podría estar mejor planteado.
  • Se echa en falta contenido adicional que justifique su compra para los que lo jugaron en su día.