[Análisis] Death’s Gambit: Afterlife para Nintendo Switch

Análisis Análisis Switch Destacados

[Análisis] Death’s Gambit: Afterlife para Nintendo Switch

La historia se centra en que seremos un Agente de la Muerte, y tendremos como objetivo acabar con unos guardianes para así purgar sus almas, aunque no será una tarea sencilla. Sus creadores aseguran que se han inspirado en Dark Souls y también en Shados of the Colossus para desarrollar este juego. Salió para otras plataformas en 2018 y que ahora, por fin, ha llegado a Nintendo Switch de la mano de Meridiem Games; pero en este caso viene en una edición con más armas, jefes finales y zonas nuevas.

Un Souls en 2D con estética pixel art

Desde el momento en que empezamos a jugar vemos la influencia de Dark Soul en este juego, básicamente al inicio después de la introducción, se nos presenta una pantalla de selección de clase, donde podremos elegir entre: soldado, asesino, caballero de sangre, mago, noble, centinela y acólito de la muerte. También te darán a elegir entre una serie de objetos principales, podrás escoger cualquiera, pero es cierto que lo ideal es que escojas el que está relacionado con tu clase.

Ahora bien, antes de nada, debes tener claro que vas a morir y mucho, es algo habitual. Es un juego muy desafiante, lleno de trampas y peligros. Pero no debes preocuparte, porque a lo largo del camino existen diferentes estatuas donde descansar, guardar el proceso guardado, subir de nivel y mejorar.

Aquí cuando mueres se pierden plumas, puedes volver al lugar donde has muerto para recuperarlas. Pero también las estatuas tienen un sistema para recuperar esas plumas, aunque aquí solo perderás una pluma, no todas, no tienes que preocuparte; aunque lo ideal es volver al punto en el que hemos muerto.

Diferentes mecánicas y estilos de juego

Al escoger un tipo de clase la mecánica de los combates variará, ya que podrás ser un personaje cuerpo a cuerpo, un mago que disfruta del combate a distancia, un noble si prefieres un juego más lento y estratégico o por ejemplo el caballero de sangre si prefieres un hack and slash más rápido. Y también habrá un árbol de habilidades desbloqueables, generales y también en función de tú clase.

Como podéis ver en función de la clase escogida podremos jugar de una forma u otra. Esto hace el juego se adapte a cada jugador en ese sentido. Pero sin olvidar que cada jefe que nos encontremos será todo un reto, al igual que pasa en Dark Souls, aquí los jefes también tienen mecánicas y patrones, por lo que es necesario prestar atención a cada movimiento que hagan para así poder ir avanzando hasta derrotarlos.

Existen otros objetos interesantes dentro del juego, como los tomos de batalla, son libros que nos reportarán un beneficio concreto. Lo mayoría estarán cerca de jefes, para así “facilitarlos” la labor de acabar con ellos, aunque todo dependerá al final de nuestra pericia.

Asimismo, cada jefe que muera nos recompensará, no sólo al matarlo sino también a medida que le vayamos bajando su vida. En otras palabras, si nos enfrentamos a un jefe y antes de que nos mate le hemos conseguido bajar la mitad de la vida, nos dará también una recompensa. Así si la siguiente vez le quitamos más de la mitad, nos volverá a dar una recompensa, así será siempre que consigamos superar nuestra marca anterior. Es una mecánica muy interesante, porque recompensa la reiteración y perseverancia, reduciendo así esa sensación de hastío o frustración.

Aún así, dentro del sistema de combate hemos notado un fallo (al menos para nosotros), en el sistema de esquiva sólo tienes un margen de milésimas de segundo para poder esquivar. Es verdad que con las habilidades del juego y las diferentes armas hay muchas opciones a la hora del combate, pero tener que esquivar con tan poco margen es un punto negativo.

Un mundo muy extenso y completo

Otro punto que valorar en este juego es su mundo, ya que hay infinidad de rutas y caminos, es un mapa complejo. Tienes en todo momento una sensación de haberte dejado algo sin explorar, pero gracias a su mapa podrás saber en todo momento dónde te encuentras y por dónde has ido pasando.

Hay todo tipo de escenarios, con diferentes plataformas, y tanto verticalidad como horizontalidad, lo cual hace que se pueda jugar con las alturas, logrando así un juego bien construido. Esto sumado a su diseño píxel art tan oscuro hace que llame aún más la atención.

Una historia bien construida

La historia nos ha sorprendido muy gratamente, porque apuesta por una narrativa interesante, contando para ello con vídeos para ir relatando todo de forma dinámica. Además, también existen diálogos de nuestro protagonista con otros personajes a lo largo del camino.

Asimismo, también hay determinadas escenas de vídeo que se activan al morir un número determinado de veces, por morir en un determinado punto o por hacerlo por un enemigo concreto. Aquí debemos añadir que nos hemos topado con algunos textos que no están traducidos al castellano y continúan en inglés, pero son sólo unos pocos.

Conclusión de nuestro análisis de Death’s Gambit: Afterlife

La mezcla de estilos funciona super bien en este juego, su base es Dark Soul y añade las ideas de Castlevania con Shadows of the colossus haciendo un juego super interesante; sumando este estilo oscuro pixel art, que está realmente bien hecho y logrado. La banda sonora también acompaña a esta estética tan característica.

Tiene unos escenarios bien conseguidos, unas rutas únicas y diferentes, siempre tienes la sensación de que te dejas algo por descubrir (y esto no tiene porqué ser necesariamente algo negativo), y por supuesto cuenta con unos jefes espectaculares y una estructura muy bien montada.

Al proporcionar un gran elenco de clases, objetos y poder organizar las estadísticas como prefieras hace que tu aventura sea siempre única y diferente, pudiendo adaptar el juego a tu estilo.

Es un juego desafiante, pero sin llegar a ser frustrante, lo cual es un punto realmente positivo. Porque hace que no te sientas estancado, ya que cada vez que te enfrentes a un jefe final, el hecho de que te dé una recompensa por superar tú marca anterior, hace que quieras seguir intentándolo. Además, es un juego corto, en menos de 20h nos hemos pasado la historia principal, aunque es cierto que si te gusta completar todo al 100% tienes unas 10 horas más.

Novedades de la versión de Switch

En el caso de la edición de Switch, como hemos adelantado, trae más contenido que en las ediciones de otras plataformas. En concreto 22 nuevas armas con más de un centenar de talentos. Incluirá, asimismo, una expansión del mundo con diez zonas nuevas, seis jefes finales para derrotar y diferentes finales que se podrán desbloquear. Por lo que también es una gran oportunidad para aquellos que ya lo jugasteis en otras plataformas.

Su formato físico tiene un precio de 26,95€ (precio de la edición definitiva). El precio en la eshop en su formato digital es de 19,99€ y su peso es de 1293,00 MB. Cuenta con textos en español, Inglés, Alemán, Francés, Italiano, Portugués, Ruso y voces en inglés.

8.0

[Análisis] Death’s Gambit: Afterlife para Nintendo Switch

Puntuación Nintenderos: Muy recomendado

  • Historia:
  • Jugabilidad:
  • Gráficos:
  • Sonido:
  • Duración:
  • Multijugador:
Destaca en:
  • Su estética oscura pixel art es una maravilla.
  • La gran cantidad de clases y objetos para adaptar el juego a tu estilo.
  • Los combates contra los jefes, poder conseguir siempre recompensa.
Flojea en:
  • En algunos aspectos del combate, como la esquiva.
  • Fallos en la traducción.
  • Ciertas zonas se hacen tediosas.