[Análisis] The Shapeshifting Detective

Wales Interactive regresa con otra película en la que el espectador se vuelve parte de la acción. Una trama de novela negra se presta mucho a ser interactiva al crear tantas incógnitas. El objetivo es claro: hay un asesinado por lo que debe haber un asesino. A partir de ahí surge el misterio, las sospechas, las acusaciones, las traiciones.

Siguiendo la pista

Muere estrangulada una joven violonchelista, su cuerpo inerte es encontrado desnudo aunque sin marcas de abuso sexual. Los máximos sospechosos parecen ser un grupo de lectores del tarot que predijeron la muerte de la chica en una de sus reuniones llevada a cabo en un hotel. En veinticuatro horas deberás resolver el crimen y evitar más víctimas.

La cinta ésta grabada en 16:9 y Full HD, pero el vídeo no se reproduce del todo fluido. Aunque las imágenes se hayan rodado con una iluminación muy dura, apropiada para una historia detectivesca, se echa en falta trabajo en la corrección de color para que unifique y dé personalidad a la película. La acción está vista desde la perspectiva subjetiva del personaje al que encarnas; sin embargo juega intercalando planos medios y primeros planos. Su empaque de telefilme se salva cuando entras en el juego y pasas por alto sus defectos para centrarte en la experiencia.

El personaje neutral y protagonista, Sam, es el encargado de la investigación. Ponerte en las carnes de un ente anónimo capaz de metamorfosearse es la mejor manera de involucrar en la trama al jugador, al darle no sólo un cuerpo indefinido sino también confiriéndole la habilidad de calzar los zapatos de cualquiera por quién sienta interés. Al visitar su habitación podrá intercambiar el rol que interpreta y ponerse en la piel de cualquiera de las personas con las que haya entrado en contacto para ver la acción desde su perspectiva.  Aunque esta libertad de acción evidencia la linealidad de la trama de cada capítulo.

Los sospechosos principales se encuentran en el hotel, junto a su gerente, pero también van entrando en juego personas externas que parecen tener relación con la víctima. Cada personaje está asociado a un emplazamiento concreto: el fotógrafo se encuentra en su estudio, tu jefe en su despacho, etc. Llamar a un taxi te permite desplazarte a las diferentes localizaciones o avanzar al siguiente capítulo. Unos episodios con otros se conectan mediante emisiones de radio que detallan el avance de la investigación. Y si te pierdes entre tantas sospechas puedes preguntarle a tu jefe cómo va el caso y qué información tenéis disponible actualmente.

La magia del cine

En algunas ocasiones de toma de decisiones la imagen se vuelve estática congelándose en un fotograma concreto. En estos casos debería haberse construido un pequeño bucle para disimular las transiciones entre la parte visual y la interactiva intentando no romper con la estética. Por el contrario, en otros momentos se utilizan planos recursos ralentizados mientras te debates entre las opciones disponibles a elegir para interrogar a los sospechosos. Algunos cortes son demasiado duros al estar el personaje realizando una acción y cambiar repentinamente de pose cuando interactúas con él, también lo es el plano de situación del hotel con el sonido ambiente de la lluvia que deja de sonar abruptamente. Siguiendo con los planos recursos, igualmente se emplean mostrando fragmentos en blanco y negro del hotel cuando debas decidir hacia qué huésped dirigirte. Mientras, puedes encender la radio.

Existen múltiples respuestas ramificadas, y en algunas de ellas puedes elegir “eliminar” para ignorar hablar con los sujetos sobre un tema determinado. Para evitar que presiones accidentalmente ésta opción deberás mantener pulsado “A” el tiempo suficiente como para que se rellene una barra que te indica en qué momento será suprimida dicha intervención.

Las voces y los menús están en inglés, al igual que sus subtítulos optativos. Enfrentarse a toda la trama en su idioma original con el apoyo de los textos la hace menos pesada. Las voces son muy claras y los actores expresivos, vocalizando y gesticulando. Es fácil seguir la narración escuchándolos y leyendo sus labios.

No puedes elegir cuándo salvar la partida ya que ésta se guarda automáticamente sin especificar visualmente en qué puntos. En cualquier juego impedir guardar partida supone un problema, más aun en este caso, teniendo en cuenta que el programa se cierra automáticamente en múltiples ocasiones.

La versión portátil es igual de disfrutable o incluso más que conectando la consola a la televisión: la imagen parece ganar en fluidez y los subtítulos mantienen un tamaño adecuado. Además, los controles táctiles permiten disfrutar del juego completo sin necesidad de conectar los mandos a la máquina.

¿Cuál es la verdadera historia?

Con sus mecánicas consigue acercarse más al videojuego que la película interactiva, ya que la trama no progresa por sí sola, debes investigar adecuadamente para poder hacer que avance la historia. Cinematográficamente no es destacable pero, comparado con el género de las novelas visuales, afrontar un juego con historia que te lo amenicen unos actores que interpretan y narran al mismo tiempo -de manera más realista imposible al ser de carne y hueso-, se hace más agradable que limitarse a leer una historia en la que unos personajes estáticos cambian ocasionalmente de expresión. Sin embargo, las interpretaciones sobreactuadas de los actores y las localizaciones en interiores en que se desarrolla la acción hacen que parezca que estás ante una obra de teatro más que ante una película.

La magia del relato está en que, aunque se plantee una historia de misterio, te vas dando cuenta de que el grueso argumental gira más en torno a ti y en torno a las tramas individuales que enriquecen a cada uno de los sospechosos. Además, tu interacción con diferentes personajes puede llegar a provocar cambios en sus relaciones interpersonales y Sam ejerce un fuerte atractivo sobre el género femenino.

Su duración es la de una película, aunque seguramente en tu primer recorrido por la aventura no desveles la verdad y quieras volver a sumergirte en ella para desentrañar todos sus secretos. Existen ligeras bifurcaciones argumentales y en los últimos compases puede cambiar el devenir de la historia potenciado por los asesinos aleatorios. El juego sabe perfectamente que volverás a jugarlo, por ello su inicio es un bucle que podría repetirse infinidad de veces, hasta que estés satisfecho con el resultado de tu experiencia. Rompería este ciclo la posibilidad de tener un árbol con el que poder volver a puntos anteriores de la trama, pero es imperdonable que se haya obviado incluir elementos que faciliten su rejugabilidad: se hace imprescindible no sólo tener a tu alcance una selección de capítulos, también poder suprimir diálogos para evitar estar escuchando repetidamente las mismas conversaciones y que a su vez estuvieran marcadas las respuestas que hubieras elegido en la partida anterior para no repetir las acciones. Estas faltas también se encuentran en anteriores trabajos del estudio y hace que el juego, a pesar de ser rejugable, se haga pesado en nuevas incursiones.

Recomendado para…

…quienes busquen una experiencia visual e interactiva consistente, centrada en sus personajes, con toques de misterio, con asesinatos, infidelidades, esoterismo y erotismo.

Otros títulos a los que me remite

• Hardocore Henry podríamos decir que juega el papel inverso a esta propuesta. Es una película que lleva el mundo del videojuego al mundo del cine, con una trama centrada en la acción y vista constantemente en primera persona.
• Aunque su estética no podría ser más alejada, comparte mucho con A Case of Distrust, disponible en Nintendo Switch. En él hay un crimen por resolver y un grupo limitado de sospechosos asociados a localizaciones concretas.

The Shapeshifting Detective ya está disponible en la eShop de Nintendo Switch a un precio de 12,99 € y con un tamaño de descarga de 5824,84 MB. Es compatible con la captura de vídeo e imagen.