Xbox no sabe qué hacer con Call of Duty; ponerlo en Game Pass o no

Xbox ha experimentado una semana especialmente tumultuosa, marcada por el anuncio del cierre de varios estudios de Bethesda el pasado martes. Entre ellos se encuentran Arkane Austin, conocidos por su trabajo en Redfall, y Tango Gameworks, responsables no solo de Hi-Fi Rush, considerado uno de los mejores videojuegos de Xbox en 2023, sino también de una secuela en desarrollo al momento del cierre.

Ante esta situación, parece evidente que Xbox está orientando su atención hacia los grandes títulos y franquicias reconocidas, como Call of Duty, con el fin de maximizar sus ingresos. Este enfoque se alinea con los rumores de un posible aumento en los precios de Xbox Game Pass. Sin embargo, a pesar de la expectativa de la llegada de títulos de la franquicia bélica, surge un debate interno en Microsoft sobre el manejo adecuado de Call of Duty en el servicio estrella de la compañía.

Según un informe de Tom Warren en The Verge, se ha revelado un debate interno en Microsoft sobre el enfoque que deberían adoptar con Call of Duty en Xbox Game Pass. A pesar de las afirmaciones anteriores de Phil Spencer y su equipo sobre cómo el servicio impulsa la creatividad y los ingresos de la compañía, parece que los altos ingresos de Call of Duty están generando cierta controversia.

Se ha confirmado que Game Pass afecta a las ventas de videojuegos, lo que sugiere que muchos usuarios podrían optar por jugar a Call of Duty a través del servicio en lugar de comprarlo. Esto plantea la pregunta de si deberían incluir los juegos de la franquicia en Game Pass, especialmente considerando que aún se venden copias de títulos más antiguos como Call of Duty: Modern Warfare 3. En este contexto, parece haber una discrepancia entre la idea original y la realidad actual de Game Pass. El tiempo revelará cómo se resolverá este dilema interno en Microsoft.

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