[Análisis] Yomawari: Lost in the Dark para Nintendo Switch

Tras Yomawari: Night Alone y Yomawari: Midnight Shadows llega a Nintendo Switch la tercera entrega de la serie que cierra la trilogía. Después de su lanzamiento en Japón, nosotros ya hemos jugado a Yomawari: Lost in the Dark, y venimos a contaros todo acerca de este terrorífico título. ¿Qué podemos esperar de esta entrega? ¿Es mejor que las anteriores? ¡No dudéis en seguir leyendo si queréis averiguarlo en nuestro análisis!

Volviendo a la carga…

Siendo una entrega que puede disfrutarse de forma independiente sin haber jugado a los juegos anteriores, en Yomawari: Lost in the Dark encarnaremos a una chica cuyo nombre podremos elegir y que sufrirá de acoso escolar… Por lo que decide tomar una decisión algo drástica que la transporta a un extraño lugar.

Allí, deberá enfrentarse a monstruos de todo tipo con la ayuda de una linterna, todo con el objetivo de recuperar sus recuerdos y poder librarse de una maldición que la atormenta y que podría consumir su vida si no toma acción dentro de un tiempo límite. A lo largo del juego deberemos ir visitando distintos lugares y conseguir diversos objetos para que nuestra heroína pueda recordar quién es en realidad y tomar cartas en el asunto.

En esta ocasión el sonido y las vibraciones serán algo realmente importante para la jugabilidad. En ciertos tramos de la aventura tendremos que cerrar los ojos para evitar a los monstruos, guiándonos por los indicadores antes mencionados para alejarnos de ellos y salir airosos de las situaciones más delicadas. Momentos tensos a rabiar.

Una niña debe explorar un pueblo embrujado y buscar sus recuerdos perdidos para romper una maldición. Deberá confiar solo en su ingenio, astucia y uno o dos escondites bien ubicados para evitar a los fantasmas retorcidos que deambulan por las calles.

El mismo terror de siempre

Y es que en Yomawari la acción siempre ha sido un tira y afloja de tensión con exploración. Nunca sabes cuándo un monstruo puede hacer acto de presencia, y tú, como niña indefensa, solo puedes huir e intentar enfrentar tus miedos como buenamente puedes: sobreviviendo. Todo este factor de inquietud se incrementa con escasos puntos de guardado desperdigados por el mapa cuyo uso cuesta monedas, las cuales también son limitadas.

La historia del juego en líneas generales nos ha gustado, y su jugabilidad (salvo un par de novedades como las que os hemos contado) peca de continuista, pero sigue estando bastante bien. Por eso, como cierre de trilogía nos parece un juego a la altura, que si bien podría haber dado más de sí con un mayor número de ideas frescas, cumple con lo que los fans esperaban de él: café para cafeteros.

Una noche para el recuerdo

En cuanto a su apartado audiovisual se refiere, el juego sigue la misma línea que los anteriores: personajes monos y adorables (podemos personalizar a nuestra protagonista a nuestro gusto) en contraste con monstruos horripilantes sacados de las peores pesadillas de Junji Ito. La banda sonora del juego sabe acompañar bien esta atmósfera, aunque la ausencia de doblaje en los diálogos es notoria. Como en anteriores ocasiones, el título nos llega en perfecto inglés.

En resumidas cuentas, Yomawari: Lost in the Dark nos ha gustado, pero sigue siendo un título continuista con respecto a sus anteriores entregas. No aporta demasiado, pero su inquietante atmósfera mezclada con la dulzura de sus personajes protagonistas genera un contraste que nos ha mantenido enganchados una vez más. Te gustará si has disfrutado de las anteriores entregas. Si no, es más de lo mismo.

Caminar solo de noche da miedo, sobre todo cuando sabes que hay monstruos terribles acechando. Mejor no mirarlos y seguir avanzando hacia adelante. Ojalá la franquicia de Yomawari también siga avanzando con el coraje para reinventarse, porque el concepto tras de ella es muy bueno y da para mucho. Un juego de notable que los fans del terror japonés disfrutarán muchísimo: inquietante pero kawaii.

Yomawari: Lost in the Dark ya se encuentra disponible en formato digital como en formato físico para Nintendo Switch a un precio de 39,99 euros, con textos en inglés y un espacio de almacenamiento requerido de 2071,00 MB.