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[Análisis] LEGO Worlds

Hace ya muchos años atrás, cuando yo tenía 13 de años (ahora tengo 24), tuve entre mis manos por primera vez un videojuego de LEGO. Se trataba del LEGO Star Wars II: The Original Trilogy. Como fan de Star Wars me pareció cuanto menos divertido por las bromas y los chistes que se hacían al respecto de las películas. Era una especie de parodia muy suave y respetuosa de Star Wars.

Pero a pesar de que entré en este juego como fan de la saga de George Lucas, en él descubrí algo mucho más grande, un universo único que funcionaba perfectamente de forma independiente. Me refiero al enorme y basto mundo que engloba todos los juegos de LEGO. Cualquiera que haya jugado a varios títulos de la marca, reconoce en todos ellos una serie de elementos comunes; el tono bromista, el valor del multijugador local y un montón de coleccionables que alargan mucho la vida de juegos no demasiado extensos.

Dada las enormes posibilidades que los desarrolladores han visto en los videojuegos de LEGO, las compañías se han animado a dar la oportunidad a la marca de recorrer un camino en solitario. Por eso, durante los últimos años hemos podido ver juegos como La LEGO Película: El videojuego, LEGO City Undercover (que algunos han llegado a considerar uno de los mejores juegos de LEGO) o LEGO Dimensions.

Pero sin duda alguna, uno de los proyectos más ambiciosos de la compañía ha sido el que se lanzó en marzo de este mismo año y que acaba de llegara a Nintendo Switch. Me estoy refiriendo a LEGO Worlds. Y si es ambicioso es porque aspira a ser el juego más cercano a lo que es la experiencia de jugar con piezas LEGO de verdad. No solo nos permite explorar mundos creados por los desarrolladores, sino que también nos propone modificarlos e incluso crearlos desde cero. Exactamente como si tuviéramos en casa un suministro infinito de piezas LEGO. Todo lo que puedas imaginar, lo podrás crear.

Conviértete en un maestro constructor

El objetivo principal de LEGO Worlds es convertirte en un maestro constructor y aprender a crear nuestros propios mundos. Para llegar a ese singular rango tendremos que conseguir 100 ladrillos dorados, piezas recolectables que nos darán ciertos personajes cuando les ayudemos. Dentro de cada mundo, a los que llegamos con nuestra nave espacial, hay una serie de personajes que nos pedirán favores y, a cambio, nos recompensarán con algún ladrillo dorado. Pero también hay otros personajes que nos recompensarán con otros objetos. Ayudarles solo dependerá de nuestras prioridades y de cuánto queramos entretenernos.

Lo interesante de la mayor parte de las misiones es que nos obligarán a trabajar con las herramientas de construcción y pulir nuestras habilidades. De esa forma, cuando lleguemos a recolectar los 100 ladrillos (en algo más de unas 10 horas), sabremos todo lo que hay que saber para crear todo lo que se nos ocurra y tendremos un extenso inventario de estructuras y personajes que podremos usar para decorar nuestras creaciones. Y es que prácticamente todo lo que veamos (plantas, personas, animales, casas, edificios, armas, etc) puede ser descubierto para, en cualquier momento y lugar, reproducirlo con exactitud. También puedes lanzarte a crear edificios desde cero, pero tardarás considerablemente más.

Para ayudarnos a alcanzar nuestro objetivo final, tenemos una serie de herramientas con las que tendremos que ir familiarizándonos a lo largo de nuestro proceso de aprendizaje. Pero tened por seguro que quien vivirá un proceso de aprendizaje seremos nosotros y únicamente nosotros. Y este es uno de los puntos fuertes del planteamiento de LEGO Worlds. Desde prácticamente el primer momento tenemos todas las herramientas y funcionalidades que nos acompañarán en el camino, pero seremos nosotros los que tendremos que aprender a controlarlas. Pero más que aprender a usarlas, tendremos que dominarlas para evitar que construir una sencilla casa se convierta en una odisea que dure toda la tarde.

Las herramientas a nuestra disposición son las siguientes:

  • Herramienta de Descubrimiento: Con esta pistola que recibimos nada más aterrizar en el primer mundo, podemos descubrir materiales, seres vivos y construcciones enteras. Por lo tanto también consta con un menú en el que se almacenan todas aquellas cosas que hayamos descubierto para, con la misma herramienta, reproducirlas allá donde nosotros queramos, incluido los vehículos. Cabe decir que la Herramienta de Descubrimiento es seguramente la más sencilla de utilizar así que disfrutad cada segundo con ella porque a partir de ahora la cosa se complica.
  • Herramienta de Copiar: Es una de las primeras herramientas que aprendemos a utilizar y por lo tanto es también de las más sencillas. Y esa sencillez es proporcional a su utilidad, ya que nos permite copiar cualquier cosa y pegarla donde nos plazca.
  • Herramienta de Paisaje: Esta una de las herramientas más importantes a la hora de construir un nuevo mundo ya que nos permite añadir cualquier tipo de terreno, bajar o subir la altura de las montañas, crear agujeros tan grandes como queramos, allanar todo un terreno o incluso alisar una montaña entera. Es el sueño de cualquier especulador inmobiliario.
  • Herramienta de Construcción: Aquí tenemos, junto a la Herramienta de Copiar, nuestra mejor aliada para crear todo aquello que se nos pase por la cabeza. Con la Herramienta de Construcción podemos hacer con cualquier tipo de pieza que tengamos en el inventario, casas, edificios, muñecos gigantes de una forma muy similar a como lo hacemos en el modo creativo de Minecraft.
  • Herramienta de Pintura: Simple y llanamente, la que nos permitirá dar color a todo lo que queramos. Y no solo color sino también efectos de sombreado gracias a los diferentes tipos de pincel (duros y suaves) que tenemos para escoger.

Además de estas herramientas, en el menú de selección desde el que podemos escogerlas, también tenemos otras tres opciones muy interesantes. Primero encontramos la opción de Construcción Libre, una opción que nos facilita la creación de estructuras y mundos ya que nos da acceso rápido a todas las herramientas y objetos de los que disponemos. También tenemos el menú de Personalización, donde podremos cambiar nuestra apariencia y ser un policía, un astronauta, un robot, una gárgola o montones de cosas más. Y por último tenemos el Inventario, donde se guardan las armas y herramientas que vamos desbloqueando a medida que avancemos, como la Mochila cohete o el Gancho.

Libertad y variedad para divertir

Si por una cosa destaca el titulo es por la prácticamente infinidad de posibilidades que nos propone. Ya solo con la selección de personajes tenemos a nuestra disposición un catálogo enorme entre el que escoger. Y lo mejor es que nuestra elección no tendrá solo implicaciones estéticas, sino que también influirá en la forma en la que nos movemos, saltamos o atacamos.

Casi siempre los juegos de LEGO han tenido un componente exploración y libertad considerablemente extenso teniendo en cuenta que no son mundos abiertos y que están ceñidos a un guión bastante marcado. Pero en LEGO Worlds se llega a otro nivel en el que el mismo progreso del juego se basa en la exploración; para avanzar tenemos que encontrar ladrillos dorados y para encontrar los ladrillos dorados tenemos que encontrar a las personas que los tienen o los lugares en los que están escondidos.

Una vez terminamos este objetivo principal, tenemos más libertad todavía puesto que desbloqueamos el creador de mundos. Aquí se destapa la locura, la caja de Pandora más extravagante y divertida porque podemos llenar nuestro mundo con lo que queramos. ¿Una torre? ¿Setas gigantes? ¿Enormes volcanes? Incluso podemos conseguir un dragón al que podemos montar para surcar los cielos. Está claro que si el juego peca en algo, no es en la falta de variedad.

La paciencia es la madre de la ciencia

Si el juego peca de algo (y lo digo en condicional porque no estoy seguro de que sea objetivamente un defecto), es en que requiere mucha paciencia. No es un título al que podamos entrar con el mismo entusiasmo con el que entramos por ejemplo, a LEGO El Señor de los Anillos. Hay que introducirse con la calma que requiere un título que no exige demasiado en su dificultad pero sí en la interiorización de sus mecánicas. En concreto, de sus mecánicas de construcción.

En cualquier caso, todo el título gira alrededor de la creación y os aseguro que para crear algo realmente impresionante necesitaréis mucho tiempo, como era de esperar. Por eso no es el típico juego al que puedas acudir en un momento breve para echar una sola partida. Es de esos títulos en los que te tienes que sumergir con tranquilidad, sentado en el sofá o tumbado en tu cama y dispuesto a dejar que te engulla por sus enormes posibilidades.

Aspecto artístico

En cuanto a lo visual, poco hay que decir. LEGO Worlds sigue la misma línea exitosa que sus antecesores, proponiendo un universo lleno de piezas LEGO que explotan, salen volando, tiemblan y hacen ruidos. Un estilo original que indudablemente ha sido esencial en el exitoso recorrido de los juegos de LEGO. Así que quien no haya jugado nunca a un juego de LEGO, descubrirá en el aspecto artístico una propuesta divertida y quien ya sea fan del género, encontrará aquello a lo que está acostumbrado.

Su banda sonora también es muy particular y significativa. La música irá cambiando en función de la temática del mundo en el que nos encontremos. De forma que además del característico acabado artístico de cada mundo, la música también nos ayudará a lograr una experiencia más completa y personalizada en cada mundo distinto.

Conclusiones

LEGO Worlds es un juego que no solo encantará, y mucho, a los fans de los videojuegos de la marca de construcción, sino que apasionará a todos los aficionados de los sandbox. Aunque hay que decir que, a diferencia de los otros títulos de LEGO, no es un título destinado a niños y adultos ya que su complejidad en los controles de las herramientas puede hacer que los más pequeños acaben frustrándose de forma rápida. Además todos sabemos que los niños en general no tienen demasiada paciencia.

Su multijugador local, como en los anteriores títulos de la marca, es extremadamente fácil y cómodo de utilizar. Simplemente con pulsar un botón en un segundo mando, la pantalla se divide y ya estamos en una partida con nuestro compañero o compañera. Esta facilidad de compartir pantalla hace que el título sea, como cualquiera de LEGO, perfecto para Nintendo Switch.

Algunos fallos en el apartado técnico empañan un poco la experiencia de juego, como por ejemplo las largas pantallas de carga. También molesta que las misiones se repitan en muchos casos. Por ejemplo, en un mundo pueden pedirnos que pintemos una casa de color azul porque queda bien con el paisaje y en otro mundo encontramos un personaje que nos pide lo mismo pero cambiando el color.

Pero con todo lo dicho, creo que LEGO Worlds, con sus infinitas (o prácticamente infinitas) posibilidades y horas y horas de juego vale mucho la pena. Y más si tenemos en cuenta que tan solo cuesta 29,99€. Una vez terminemos el desafío principal, tendremos mucho trabajo por delante construyendo mundos y explorando los nuevos mundos que ofrecen los DLC que irán llegando. Así que si sois creativos y os gusta LEGO, esta es vuestra mejor opción para convertiros en maestros constructores.

https://youtu.be/MMY_cj2ucDc

8.0

[Análisis] LEGO Worlds

Puntuación Nintenderos: Muy recomendado

  • Historia:
  • Jugabilidad:
  • Gráficos:
  • Sonido:
  • Duración:
  • Multijugador:
Destaca en:
  • Nos ofrece infinitas posibilidades creativas.
  • Tiene el carácter divertido y bromista que caracteriza a todos los juegos de LEGO.
  • Teniendo en cuenta sus posibilidades, el precio es muy interesante.
  • Como a cualquier gran sandbox, podemos volver siempre que queramos.
Flojea en:
  • Las pantallas de carga se hacen muy largas en algunas ocasiones, como cuando nos movemos de un mundo a otro.
  • Misiones repetitivas que harán desees desbloquear el creador de mundos.