[Artículo] La necesidad de los remakes en los videojuegos

En los últimos años se han puesto de moda y ha habido un poco de controversia en cuanto a la necesidad de los remakes en diferentes ámbitos como el cine, la televisión o los videojuegos. En esta ocasión, como no podía ser de otro modo, me gustaría daros mi punto de vista de los remakes pero centrándome en los videojuegos, concretamente en los de Nintendo.

Primero hay que tener claro que es un remake. Un remake es una adaptación que identifica las producciones audiovisuales que reproducen fidedignamente la trama, personajes, ambientación y prácticamente cualquier detalle de una obra anterior. Otros términos que la gente utiliza es nueva versión, reedición y refrito, pero personalmente me gusta más el término remake.

El debate que han generado los remakes en los videojuegos, básicamente se puede resumir en que mientras algunos los consideran innecesarios y que sólo sirven para rellenar el catálogo de una consola, otros los consideran imprescindibles para poder volver a revivir las sensaciones jugonas que experimentaron con dicho juego hace años en una consola actual y con novedades o para poder jugarlos por primera vez aquellos que no tuvieron la oportunidad de hacerlo en su día.

Para poder tener una visión objetiva de este tema es necesario ser respetuoso hacia los gustos de los demás, pero sobretoto abierto de mente. Digo esto, porque muchas veces tendemos a pensar que lo que nosotros opinamos es lo correcto y que es la única verdad absoluta y no es así. Hay tanta diversidad como géneros en los videojuegos y tantas opiniones válidas como gustos personales.

En mi opinión, los remakes son totalmente necesarios, pero para que sea así hay un factor clave y ese no es otro que el tiempo. Es decir, para poder hacer un remake es necesario que haya transcurrido cierto tiempo (años) desde el juego original, para que sea visto como algo realmente necesario. Es algo que parece evidente a priori, pero mucha gente parece olvidarse de ello cuando anuncian uno como si por el hecho de haberlo jugado más recientemente eso lo hiciera menos longevo desde que salió.

Claros ejemplos de esto son The Legend of Zelda: Ocarina of Time 3D de Nintendo 3DS y The Legend of Zelda: The Wind Waker HD de Wii U. Hay muchos ejemplos de remakes, pero me centraré en estos dos, por diversos motivos, pero básicamente porque son de una saga muy conocida, relativamente recientes y además son títulos por la gran mayoría conocidos y jugados ya sea en una o ambas versiones. En concreto un servidor sólo ha jugado estos remakes.

El original The Legend of Zelda: Ocarina of Time fue lanzado por primera vez el 21 de noviembre de 1998 en Japón para Nintendo 64 (el 23 de noviembre de 1998 en América y el 11 de diciembre de 1999 en Europa) y su remake titulado igual, pero con la coletilla “3D” fue lanzado el 16 de junio de 2011 en Japón para Nintendo 3DS (un día más tarde en Europa y 3 días más tarde en América), es decir, 13 años después.

Este remake traía muchas novedades, pero una de las nuevas características más notables es la habilidad para equipar armas de una forma más rápida al usar la pantalla táctil, ya que a su vez, la arquitectura de la propia consola podría permitir movimientos más precisos mediante el giroscopio interno de la 3DS; asimismo, esto permite que el jugador realice movimientos más acertados y directos cuando accede en una perspectiva en primera persona. Además también se incorporó el modo Master Quest que es prácticamente igual al modo de juego normal, pero incluye un notable aumento de la dificultad (número de enemigos, vitalidad…), se altera el orden de aparición y la forma de resolver algunos puzles y además se invierten las coordenadas de este y oeste en las mazmorras y del mapa general (modo espejo). El “problema” es que este nuevo modo sólo se podía jugar una vez completado el juego en modo normal, por lo que muchos que lo jugaron en su día en Nintendo 64 se quejaron de que no lo incluyeran desde el principio para así disfrutar de este nuevo modo de inicio. Además venía por primera vez con los textos traducidos al español, (el original era con textos en inglés, aunque incluía un folleto con la traducción) algo que sin duda gustó a todos.

Hasta ese momento prácticamente no había juegos en su catálogo que realmente llamasen mucho la atención para adquirir la nueva y hasta la fecha costosa Nintendo 3DS, pero sin duda sacar al mercado algo en un principio tan arriesgado como un remake de uno de los videojuegos mejor valorados por el público y la crítica, e incluso considerado por muchos, como el mejor videojuego de la historia hasta la fecha resultó ser todo un acierto y marcó un punto de inflexión para que la gente empezara a mostrar más interés por comprarla y así poder jugar a esta maravilla ahora en versión portátil.

No estuvo exenta de polémica, porque a algunos les pareció totalmente absurdo que en un catálogo hasta la fecha bastante pobre sacaran un remake de un juego ya jugado por muchos en vez de sacar una entrega totalmente nueva, en cambio muchos que no lo pudieron jugar en su día (entre los que me incluyo) les pareció toda una sorpresa y maravilla ya que Nintendo les estaba dando otra oportunidad de hacerlo.

Con The Legend of Zelda: The Wind Waker pasó algo muy parecido. El juego fue lanzado en GameCube el 13 de diciembre de 2002 en Japón (el 24 de marzo de 2003 en América y el 3 de mayo de 2003 en Europa) y su remake llamado igual pero con la coletilla “HD” fue lanzado en Wii U el 26 de septiembre de 2013 en Japón (el 4 de octubre de 2013 en América y Europa), es decir, 11 años después.

Además del apartado gráfico en alta definición y formato panorámico, existen diversas diferencias entre esta versión de Wii U y la original de Nintendo GameCube. Las principales son las siguientes:

• Modo Héroe: un modo de juego más difícil, ya que recibes el doble de daño y no aparecen corazones con los que recuperar salud. A diferencia del modo Master Quest de Ocarina of Time 3D, está disponible desde el inicio.
• Vela veloz: una vela con la que podrás navegar sin importar la dirección a la que sople el viento.
• Botella Tingle: con ella podremos lanzar mensajes al mar que luego podrán ver otros usuarios gracias a Miiverse (desaparece un objeto llamado Tinglevisor).
• Caja cromográfica: se consigue de una manera algo más fácil.
• Fragmentos de la Trifuerza: se logran de una forma algo más sencilla.

Aparte de eso hay algunas diferencias más, como la ubicación diferente de una de las Piezas de corazón y la inclusión de 5 Mapas del tesoro más.

Según el productor de la saga, Eiji Aonuma, dicho remake surgió de la experimentación que su equipo llevó a cabo con las diversas direcciones artísticas que ha tenido la serie a lo largo de su existencia para decidir cuál sería la más adecuada para el siguiente título original, que será mostrado por primera vez al público durante el E3 de este año (tal y como declaró el propio Aonuma durante la presentación de The Legend of Zelda: A Link Between Worlds en octubre de 2013 en Nueva York).

En este caso, si que había ya algunos juegos destacados en el catálogo de Wii U, pero aún eran escasos y no fueron pocos los que igualmente se quejaron de que la sobre mesa de Nintendo necesitaba otro juego totalmente nuevo y no un remake de un juego anterior de la saga Zelda, por lo que fue bastante criticado, aunque para muchos se ha convertido en uno de los mejores juegos que tiene actualmente en su catálogo.

En definitiva, en ambos casos han transcurrido entre el juego original y el remake más de 10 años, por lo que creo que son videojuegos en los que el hacer un remake está bastante justificado, ya que no todos los gamers han podido jugar a las entregas originales por diversos motivos, no sólo la edad, y de esta manera han podido hacerlo.

Por este motivo creo que los remakes sí son necesarios, pero no siempre imprescindibles. Creo que, como he comentado anteriormente, el tiempo transcurrido entre el juego original y su remake es clave y que pienso que no debe ser inferior a 10 años para que la gente pueda apreciar un cambio sustancial y deseen volver probarlo o dar la oportunidad a quienes no lo pudieron hacer en su día.

Ya hace un tiempo que se habla del rumor de que puedan sacar un remake de The Legend of Zelda: Majora’s Mask (juego de Nintendo 64 del 2000) y pese a ello de momento nada se sabe. El problema es que fue relanzado para GameCube como parte del recopilatorio The Legend of Zelda: Collector’s Edition y en la Consola Virtual de Wii en 2009, por lo que quizás ese sea el motivo de que aún no lo hayan hecho. Creo que sería una buena opción que lo sacaran en 3DS y seguro que a más de uno (entre los que me incluyo) les gustaría que así fuera. No obstante, aunque quizá no lo veamos a corto plazo, seguro que Nintendo lo tiene presente y puede que algún día den el paso para hacerlo realidad, aunque no sea en las actuales consolas.

Como todo es muy subjetivo y no de todos los juegos se pueden hacer remakes ni son necesarios, pero sí algunos de los que gusten más al público podrían ser considerados para ello. A veces existe el miedo de que dicho remake sea peor que el original y algunos jugadores pueden presentar reticencia a comprarlo por el hecho de creerlo innecesario al haberlo jugado en su día el original o por miedo de ver que ese juego que en su día les encantó (algunas veces sobre valorado por la nostalgia) quede empañado por una experiencia inferior, pero lo que está claro, es que independientemente del juego del que se haga un remake es simplemente una opción más en el mercado y nadie obliga a comprarlo, por lo que nadie debería poner el grito en el cielo por este motivo, al igual que, como ya he comentado, permite a muchos por primera vez jugarlo y como siempre digo lo más importante de un videojuego es la experiencia personal de disfrute que te aporta, el resto es complementario.