Pokémon: ¿Por qué cambiaron las inmunidades al Tipo Fantasma en la cuarta generación?

Nos ha llegado un curioso mensaje relacionado con una de las franquicias más destacadas de Nintendo. Estamos hablando efectivamente de Pokémon.

El tipo Fantasma fue introducido por primera vez en la primera generación. Su función inicial era contrarrestar a los Pokémon de tipo Psíquico como Alakazam y sus evoluciones pero esto no acabó siendo así.

Finalmente el tipo Psíquico terminó siendo inmune al Fantasma, lo que provocó que su única finalidad fuera combatir contra otros Pokémon de su mismo tipo, convirtiéndolos en bastante inútiles en la primera generación.

Cabe destacar que a partir de la segunda generación los Pokémon de tipo Fantasma ya fueron Supereficaces contra el tipo Psíquico, pero la falta de movimientos de tipo especial en este tipo seguían generando situaciones débiles para el tipo Fantasma, por lo que se produjo una adaptación en la cuarta generación.

¿Cómo afectó el cambio en la cuarta generación al tipo Fantasma?

En la cuarta generación varios ataques de tipo Fantasma fueron cambiados a tipo especial, lo que provocó que muchos de ellos se convirtieran en algunos de los más poderosos hasta el momento. De esta forma hicieron que su presencia en combate aumentara considerablemente.

Por ello, Pokémon como Gengar resultaron ser una gran opción en combate debido a la posibilidad de utilizar potentes movimientos especiales como Bola Sombra. Además, el cambio en el tipo Acero presente en la sexta generación, mediante el cual dejaba de ser resistente al tipo Fantasma, provocó que estuvieran aún más presentes.

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