A ver si crece y aprende a volar. Al menos sé que atrae a otros gorriones, que lo he puesto en el balcón y andan dos o tres revoloteando alrededor 😆
Me dan ganas de soltarlo cuando vienen los otros, pero sé que no va a despegar del suelo, un blanco demasiado fácil para los gatos que rondan el barrio 😕