[Opinión] Farewell, Wii U

Artículos Wii U

[Opinión] Farewell, Wii U

Te escribo estas líneas con cierta tristeza. Con cierta sensación de lo que “pudo haber sido”. Nunca han sabido valorarte como realmente te mereces, Wii U. Yo el primero, que durante estos años quizás me he centrado más en las cosas en las que fallabas que en tus aciertos, los cuales, por cierto, son bastantes más de los que la gente cree. La verdad es que en estos momentos en los que estamos despidiéndote, aunque nos aferremos a lo que queda por llegar para evitar, para evitar el fatídico final, me doy cuenta de que la mayoría de tus sombras, no fueron en realidad culpa tuya.

Tus “padres” no te han mimado lo suficiente, tal vez más atentos a tu hermana pequeña, 3DS, que a pesar de empezar con dudas ha crecido fuerte y sana. Pusieron muchas esperanzas en ti cuando estabas de camino, tal vez demasiadas, y prometieron cosas que no podías cumplir, pero como digo, no es culpa tuya. Los años fueron pasando, y salvo alguna honrosa excepción, no estuvieron a tu lado cuando más atención necesitabas. Todo era una amalgama de retrasos, cancelaciones, y aquellos que prometieron ayudarte en tu andadura empezaron a señalarte con el dedo, cuando este debía apuntar a quien te fabricó.

wii u console consola

Desde entonces, ya en aquel lejano 2012 hasta hoy, tu ciclo solo se puede resumir en una frase: has hecho lo que has podido con las herramientas que te han dado. Y teniendo en cuenta que te han dado tan poco, podemos decir que has hecho un magnífico trabajo. Estamos más que probablemente ante tu último año de vida, aunque hace ya casi dos que los peces gordos decidieron mirar para otro lado, y anunciar que te abandonaban sin anunciarlo. Creo que tu sitio estará en el cielo de las grandes olvidadas, junto con una pariente tuya llamada Game Cube a la que le ocurrió algo muy parecido a ti, o a Dreamcast, de vuestra antaño rival, SEGA. Todas fuisteis y sois máquinas con un tremendo potencial, pero devoradas por el feroz mercado, donde prima la publicidad, el foco mediático que os falto a vosotras.

De cualquier manera, me quedo con que eres una consola de las que merece la pena conservar en su caja original, con el mayor de los cuidados. Primero porque a estas alturas, no sabemos con certeza qué futuro le espera en el medio y largo plazo a las plataformas físicas de videojuegos, y segundo porque nos dejas un catálogo quizás no muy extenso, pero sin duda perlado de grandes joyas imprescindibles: Bayonnetta, Splatoon, Mario Maker, Xenoblade X, Mario Kart 8, etc, etc, etc, etc…

splatoon-weapon-3

Sé que el tiempo te tratará con justicia, y te pondrá en tu lugar, y en los foros y redes sociales se recordará como “se hablaba mal de la Wii U que tanto valoramos ahora”, y aunque sea a título póstumo, creo que a todos nos gustara que llegue ese reconocimiento. En fin, que gracias por estos años, aun cargados de sinsabores, esperemos que la Gran N ponga más atención y cuidado a tu predecesora y evite, dentro de lo posible, distraerse demasiado con vías alternativas como los amiibo.

Te vas dejando un regusto “mágico”, una agradable pero triste sensación de potencial perdido dándonos lo que parece casi sin lugar a dudas, un “hasta siempre” que marcara una época: The Legend of Zelda: Breath of the Wild. Pero eso aun tardara unos meses en llegar, hasta entonces, casi todo será oscuridad y silencio, al menos si nos referimos a títulos que te alimenten con la calidad proporcional a tus posibilidades, apenas uno o dos, otro indicio de que te dejan morir antes de tiempo. Ellos no te ayudaron a llegar al gran público, y este te dio la espalda sin conocerte apenas. Qué lastima.

the legend of zelda: breath of the wild

Por mi parte, estoy casi deseando entrar en esa fase de vigilia donde te dejaré (momentáneamente) apartada, para redescubrirte dentro de tres o cuatro años, con otros ojos, ya apartados de tanto ruido, de tanta opinión interesada y de tanto criterio subjetivo. Será una sensación magnifica, estoy seguro.

Nos vemos pronto, Wii U, cuídate lo que no te han cuidado los demás.