Logan Paul comparte cómo su perro mordió una rara carta Pokémon valorada en 25.000 dólares
Para muchos niños de los años 90, Pokémon fue un fenómeno absoluto. La adictiva jugabilidad del querido RPG con su popular lema «Hazte con todos» se extendió como la pólvora cuando los niños buscaban intercambiar monstruos de bolsillo con sus amigos.
El Juego de Cartas Coleccionables (JCC), que se introdujo en 1996, demostró ser igual de popular. Pues bien, hoy os traemos una curiosidad relacionada con él y es que durante el podcast imPaulsive, el popular YouTuber Logan Paul de 25 años reveló que su perro, llamado Broley Blue, estuvo peligrosamente cerca de arruinar una rara carta Pokémon de Charizard que según él está valorada en 25.000$. El can destrozó una parte del estuche de coleccionista después de masticarlo, ya que parece ser que lo confundió con un juguete.
Pensé que mi perro se había comido una PSA 9 de Charizard que era una tarjeta de 25.000 dólares. ¡Está ahí arriba ahora!” dijo señalando el coleccionable de Nintendo en un estante. “Descansa en paz, se ha ido para siempre.”
Como muchos de los coleccionistas sabréis, el valor de un artículo viene determinado por su estado de conservación. En este caso parece ser que solo fue masticada una esquina del estuche de la carta pero no se especifica si la mascota dañó la carta en sí, ya que de ser así su valor podría reducirse considerablemente.
Por otro lado, el joven también reveló que gastó nada menos que 216.000$ al comprar una rara caja de cartas Pokémon de la primera edición del juego básico de 1999 a través de una subasta.
“Esta es probablemente la caja de cartas Pokemon más rara en el mundo entero. Sólo hay… Ni siquiera sé si queda un puñado. Nadie tiene estas cajas”, afirmó.
Como ya hemos comentado en anteriores ocasiones, coleccionar cartas de Pokémon es un hobby caro, ya que un solo pack puede costar hasta 10 dólares, dependiendo del juego. Esto evidentemente es solo para las que se venden en las tiendas, ya que un pack puede costar tranquilamente más de 100 dólares para los más antiguos que ya no se venden y las más raras incluso miles de dólares. Moraleja: no dejéis artículos valiosos al alcance de mascotas porque podríais lamentarlo.
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