[Análisis] Telling Lies para Nintendo Switch

Análisis Análisis Switch Nintendo Switch

[Análisis] Telling Lies para Nintendo Switch

Sam Barlow se ha ganado un hueco en el sector como uno de esos diseñadores que sabe contar historias de una manera muy especial. A lo que ya demostró con títulos de gran extensión como Her Story, se le suma una pericia y una sensación de perfeccionar su fórmula con Telling Lies, título que llega a Nintendo Switch de la mano de Annapurna Interactive, para ofrecernos una experiencia inmersiva muy diferente a lo que acostumbramos a jugar, en forma de FMV con toques de point and click. ¿Destapamos su gran verdad? ¡Vamos a ello!

Tú, un ordenador y la sensación de querer descubrir todo

El comienzo de Telling Lies ya es realmente prometedor: vemos a una mujer avanzar por un pasillo hasta entrar en un apartamento, donde se sienta frente a una mesa, enciende un ordenador y… ¡ya estamos jugando!

Poco o nada se cuenta sobre lo que debemos hacer o sobre quién es esa mujer a la que, por lo que hemos podido comprobar, encarnamos dentro del título. Disponemos de una pantalla donde se nos muestra un buscador de vídeos basado en una potente red de rastreo llamado Retina. Estos vídeos pertenecen a diferentes grabaciones y vídeollamadas de un grupo de personajes que parecen tener algún tipo de nexo entre sí.

Algunos archivos dentro del equipo nos explican el método para buscar, basado en palabras clave que podremos ir poniendo para acceder a nuevos vídeos donde se pronuncien dichas palabras. Para ello, podemos pausar el vídeo y clicar sobre dicha palabra en los subtítulos para buscar de manera automática. A veces pueden ser nombres en clave y, a veces, palabras que puedan parecer de lo más banales las pueden darnos una nueva clave.

Para organizar mejor estos vídeos, contamos con algunas herramientas, que nos permiten anotar etiquetas, revisar el historial de vídeos visualizados y poner marcadores en aquellos que consideremos de gran relevancia.

Poco más voy a contaros de la historia de Telling Lies, pues no quiero incurrir en ningún tipo de spóiler. Además, su trama y la forma de jugar con la narrativa es el punto fuerte de un FMV muy especial, donde no jugamos tanto con las decisiones puntuales o respuestas concretas, sino con la exploración de una historia que puede destaparse de cientos de formas y acaben redondeando una idea global capaz de mantenernos enganchados.

A medida que descubrimos nuevos vídeos querremos avanzar más y más, despistándonos a veces con nuevos  nombres que nos llevarán a replantear nuestras búsquedas, atar cabos, sacar nuevos nombres…etc.

Telling Lies es una gran pieza narrativa que juega muy bien con la intriga y cuyo pero más grande reside, desde mi experiencia, en su final. Disponemos de varios finales alternativos, sin embargo, el efecto que puede dejarnos después de estar tan enganchados a su trama, resulta algo frío. Y es que la forma en la que el juego nos mete de lleno en la historia y la manera de investigar nuevas vías nos puede hacer pensar que daremos con un final rimbombante que nos dejará con la boca abierta… y en este caso, no ha sido así. Con esto no quiero decir que se nos arruine la experiencia, ni mucho menos, pero sí que podemos llegar con unas expectativas demasiadas altas a un final que nos hace bajar de la cima.

Eso sí, la pieza de Sam Barlow deja una gran sensación narrativa a nivel global que considero que debería ser experimentada por todos los amantes de las buenas historias.

Plantel de lujo, escenas que atrapan

En un juego FMV no vamos a hablar de gráficos ni de diseños, pero sí de actores, tomas, iluminación y la capacidad para transmitir. Y en este punto, debemos darle un más que merecido notable a Telling Lies.

Entre los actores principales, es muy probable que os suenen Logan Marshall-Green (The O.C, 24), Alexandra Ruth Shipp (Straight Outta Compton), Kerry Bishé (Gran Piano, Narcos) y Angela Sarafyan (Westworld, American Horror Story). Sus interpretaciones nos meten de lleno en la dinámica del juego, dándonos la sensación de que realmente estamos presenciando una serie de videollamadas y grabaciones, siendo esos “espectadores en secreto” de una historia llena de mentiras y asuntos más que turbios.

Dentro de la disposición, encontramos una gran cantidad de tomas fijas que nos permiten ver como lo haríamos si presenciásemos una web cam o una cámara de un smartphone, aunque a veces tienen ligeros movimientos (es una grabación con cámara oculta, el personaje muestra su entorno…etc.).

Además, el sonido cumple a la perfección con el ambiente que se quiere transmitir. A los sonidos básicos de los clics en nuestro ordenador y la apertura de archivos, encontramos unos diálogos limpios y bien ejecutados que disfrutamos en su idioma original (inglés) con los subtítulos en castellano (algo que agradeceremos a la hora de buscar nuevos archivos en base a ellos). Desde mi punto de vista, es todo un acierto mantener las voces originales de la obra, pudiendo entrar aún más de lleno en todo lo que se quiere transmitir de origen.

A los mandos de una gran película

Jugablemente, Telling Movies se adapta bien a los mandos de Switch. Podemos controlar la reproducción en todo momento, pausarla, retroceder y avanzar con los ZR y ZR. También podemos hacerlo con el stick derecho. Así, podemos ver vídeos completos, llegar a la sección que nos interesa o adelantar esos momentos de silencios que ya hemos visto anteriormente.

También disponemos de la posibilidad de hacer uso de la pantalla táctil para clicar sobre los vídeos e incluso escribir los términos que deseemos buscar. Por tanto, podéis gestionar vuestra búsqueda como os resulte más cómodo.

Lo cierto es que estar a los mandos de una película como Telling Lies resulta una experiencia, cuanto menos, disfrutable. En cuanto a su duración, llegar al final por primera vez puede llevarnos entre tres y cuatro horas. Es importante recalcar que es el propio juego el que nos va marcando un poco el ritmo en base a los vídeos que hayamos visto, pues tiene su propio reloj que nos indica día y hora. Llegados a cierto punto, percibiremos que la trama se dispone a mostrarnos su final (de nuevo, no diré nada, para no destapar posibles claves).

Al acabar el título, siempre podemos lanzarnos a completarlo de nuevo poniendo énfasis en el visionado de otros vídeos que podamos encontrar o tratando de investigar más la trama según ciertos personajes y palabras, para dar con los diferentes finales.

También cabe destacar que, al finalizar el título por primera vez, podemos acceder a un informe donde se nos explica un más la trama y el hilo que más hemos seguido. Además, podemos volver a ver los vídeos de nuestra historia completada por si nos hemos quedado con alguna duda o incluso echar una partida al archiconocido Solitario (sí, lo tendremos instalado en nuestro ordenador). Ver todos los vídeos puede llegar a incrementar unas horas más la duración del mismo.

Conclusión

Telling Lies sabe jugar muy bien con la narrativa, poniéndonos a los mandos de un videojuego capaz de absorbernos y crearnos intriga desde el primer segundo. Si bien su final puede llegar a dejarnos algo fríos, su experiencia general deja un muy buen sabor de boca. Estamos ante uno de los FMV de Nintendo Switch que deben ser probados por los amantes de las buenas historias. Podéis encontrarlo en la eShop de Nintendo Switch al precio de 16,99 € y necesitaréis un total de 7,4 GB en vuestra consola para instalarlo.

8.0

[Análisis] Telling Lies para Nintendo Switch

Puntuación Nintenderos: Muy recomendado

  • Historia:
  • Jugabilidad:
  • Gráficos:
  • Sonido:
  • Duración:
  • Multijugador:
Destaca en:
  • La forma de envolvernos en su trama y jugar con nuestra expectación.
Flojea en:
  • Su final deja algo frió en comparación con el resto de la narrativa.


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