[Análisis] ICEY

El género de acción ha sido interpretado de un sinfín de maneras distintas, desde gigantescos mundos abiertos a simples pero divertidos scrolls laterales en 2D. Y de esto último es de lo que se trata ICEY, pero añadiéndole un magnífico toque de frenetismo que te va a mantener pegado a la pantalla hasta el final de la aventura.

Un estilo artístico Cyberpunk de lo más original

La ventaja que tienen los juegos indie frente a los triple A es que pueden dejar de lado la estética realista para centrarse en algo más único y bello. En este apartado ICEY no es ninguna excepción, ya que su dirección de arte es maravillosa, contrastando el diseño anime de los personajes con el apagado y sombrío del escenario de una manera magistral.

La ambientación también es algo a destacar, ya el toque Cyberpunk esta muy bien conseguido, tanto la desolada pero reconfortante naturaleza como las peligrosas alcantarillas. Los escenarios son muy variados y tienen una personalidad propia muy marcada, personalmente mi favorito es el teatro donde luchas contra uno de los mejores jefes.

Como ya he mencionado anteriormente los personajes y ambientación están muy bien hechos, pero no valdría nada la pena si los enemigos y bosses a los que matar fuesen un desastre, pero afortunadamente no es así. Sus diseños son increíbles, hay una gran variedad de ellos y, para variar, pegan muy bien con la estética post apocalíptica. La mayoría son robots muy bien hechos con unas armaduras y armas que se hacen creíbles, en general este apartado es de diez. Gracias a todo esto el explorar los diferentes niveles y encontrar mejoras para el personaje o jefes secretos es toda una delicia, lo que sin duda es positivo ya que todo el contenido secundario es de calidad y no te lo vas a querer perder.

Para acabar este apartado me gustaría hablar de la banda sonora. Este es uno de los únicos puntos donde veo que el juego flojea, ya que aunque acompaña a la acción en todo momento, se queda aquí, sin aportar nada más al título. Una pequeña decepción teniendo en cuenta la excelencia de todos los otros apartados.

Una jugabilidad rápida y frenética

En este tipo de juegos la jugabilidad es donde el juego realmente tiene que brillar, ya que como vimos en Windscape, no sirve de nada tener un apartado artístico deslumbrante si luego el sistema de combate no acompaña. Por suerte en este caso los espadazos se sienten mejor que nunca. La velocidad y agilidad de ICEY (la protagonista) hacen que cada enfrentamiento sea todo un destello de golpes y esquivas frenéticas de la que no te vas a cansar. Si a esto le sumamos un sistema de habilidades que introduce un generoso número de nuevos combos, el resultado es un sistema de combate de lo más completo en el que no vamos a sentir repetitividad en ningún momento.

Pero nosotros no somos los únicos bien armados, ya que los enemigos van bien servidos en este aspecto. Por separado todos son bastante asequibles, pero es cuando juntas a un grupo de cuatro o cinco es cuando las cosas se empiezan a poner chungas, ya que no puedes estar pendientes de todos y tienes que idear una estrategia para ir matándolos uno a uno. Pero cuando realmente brilla la IA de este juego es contra los jefes.

Estos no solo tienen un diseño bonito, sino que también tienen un buen surtido de movimientos que te van a poner las cosas difíciles a medida que avances. Cada uno tiene un set de movimientos distinto que varía según su diseño, los más fuertes y pesados serán lentos pero infligirán mucho daño y gozarán de una barra de salud mas grande, mientras que los más pequeños tendrán menos salud y sus ataques harán menos daño, pero serán más veloces y tendrás más problemas tanto para esquivar como para darles. Nada especialmente original pero que acaba siendo clave para volver al título uno extremadamente adictivo.

Una historia sorprendentemente profunda para los estándares del género

Los juegos en este género no acostumbran a dar mucha importancia a la historia, y acostumbra a servir más de motivación vacía entre combate y combate que de hilo conductor de una trama realmente profunda. Pero por loco que parezca, ICEY consigue tenerla. Esta está explicada vagamente y deja que la descubras tu solo a través del mundo y los enemigos que te vas encontrando, narrativa usada en juegos como Dark Souls.

Esto puede parece extraño ya que los entornos en ese juego son mucho más abiertos y detallados, pero en ICEY funciona perfectamente, y aunque la mayoría de la historia se deja a interpretación del jugador, acaba mandando un mensaje extremadamente fuerte. No os lo vamos a contar porque sería estropearos por completo la experiencia, pero solo dejar claro que el giro que da en un momento, aunque te lo esperas, no quieres creértelo. Es parecido a lo que pasa en Final Fantasy VII con la muerte de quien ya sabéis, sabéis que ha pasado pero después de todo lo que habéis pasado juntos no quieres que acabe así.

Afortunadamente para todos aquellos que no sepáis inglés o japonés os va a gustar sabe que el juego viene traducido al español. Los que va a facilitar mucho el comprender la excelente historia que ofrece.

Mi mayor queja viene en cuanto a la duración. Esta oscila entre las 6 y 9 horas dependiendo de la dificultad y contenido secundario que hagáis. Pero teniendo en cuenta todo lo que tiene que ofrecer en forma de habilidades, parece un poco corto, sobretodo porque no vas a tener tiempo de probarlas todas.

Conclusión

En resumen ICEY es un excelente juego de acción al que vas a estar enganchado gracias a su excelente sistema de combate y mejoras. Su mundo es una delicia de explorar y su magnífica historia te va hacer querer saber que va a pasar a continuación todo el rato. Aunque su duración es un poco escasa, al final ha valido la pena el viaje.

ICEY está disponible en la eShop por un precio de 8,39€. Ocupa 1794,11 MB.