[Análisis] Othello

El lanzamiento de Nintendo Switch ciertamente no anda sobrado de juegos, y las experiencias que actualmente ofrece la consola pasan de forma imprescindible por The Legend Of Zelda: Breath Of The Wild, pero también podemos encontrar en el catálogo (sobre todo digital) ofertas como la que tenemos hoy: Othello.

El título de Arc System Works llega a Nintendo Switch después de pasearse por PSVita para intentar sacar el máximo partido posible a una pantalla multitáctil aun en pañales y, como no, siguiendo la filosofía de juega donde quieras, cuando quieras y con quien quieras.

Juego de mesa digital

Othello, también conocido como Reversi, es un juego de mesa japonés para dos personas creado en 1971, que consiste en colocar fichas blancas y negras a través de un tablero cuadriculado.

Los jugadores deben colocar sus fichas, una a una y por turnos, intentando hacerse con la mayor parte del tablero siguiente una regla donde, todo lo interior entre dos fichas de colores del mismo color, se convierte en el color de dichas fichas. Gana la partida el jugador con mayor número de fichas de su color en el tablero.

Gráficamente tenemos un título simple, enfocado a la representación clara de las fichas del juego con colores planos y una estética no muy realista, pero que visualmente queda muy bien.

Nada ha cambiado el concepto respecto al original, aunque resulta muy cómodo jugar a este juego en una pantalla táctil tan amplia como la de Switch. Quizá, y al ser un juego lento sobre un tablero, en formato digital se ha podido agilizar mucho, cambiando un poco la forma y la rapidez con la que piensa el jugador. En cualquier caso es muy cómodo y rápido echar una partida de Othello en el metro o autobús, quizá donde está más dirigido esta versión.

Toca todo lo que quieras

Puede que los kit de desarrollo de Nintendo Switch más tempranos no dispusieran de la pantalla táctil, y por ello muchos juegos de lanzamiento no implementan esta funciona. No es el caso de Othello, cuya función estrella podríamos decir que es esta.

Los modos de juego son escasos, para un jugador y multijugador, sin otros retos especiales más allá de partidas individuales sin recompensas que motiven al jugador a seguir un incremento de dificultad, más allá de la satisfacción de ganar a la máquina.

Esta inteligencia artificial es adaptativa, y creemos que hace su función de forma más que correcta, adecuando la dificultad del juego a jugadores desde iniciados hasta experimentados.

Pero quizá el modo multijugador sea el más importante siguiendo la filosofía de la consola, y es que no solo podremos jugar en la pantalla táctil dos jugadores como lo haríamos en una tableta. También podremos desacoplar los mandos de la consola y jugar en modo televisor, moviendo los cursores a través de la pantalla con el stick de control del mando de una forma… no tan cómoda, pero funcional al fin y al cabo.

Tendremos ayudas para saber dónde colocar las fichas y el resultado de nuestra jugada, aunque son opcionales y podremos desactivarlas en cualquier momento, incluso por jugadores.

El juego dispone además de un manual electrónico en internet, accesible desde el propio navegador “oculto” de la consola, donde podremos informarnos sobre las reglas de Othello y sus posibilidades. Eso si, el título está únicamente en inglés, aunque si conocéis el juego de mesa no tendréis que saber el idioma para utilizarlo.

Dale la vuelta

Arc System Works ha traído de lanzamiento a Nintendo Switch uno de esos juegos que no son imprescindibles en el catálogo de la consola, pero aportan variedad, rellenan huecos vacíos y para un grupo particular de usuarios, resultan muy divertidos y entretenido.

Othello vale 4,99€ en Nintendo eShop, y resulta difícil compararlo con miles de opciones gratuitas que podemos encontrar en iOS o Android, pero el título está bien realizado aunque no vaya sobrado en modos de juego, además su funcionamiento es muy bueno, sin problemas de rendimiento de ningún tipo y aprovechando las posibilidades de la consola, como la pantalla táctil o los mandos modulares.

Además, y aunque en tabletas también es posible, nunca será tan fácil como con Switch tener Reversi y pasar nuestra partida del modo portátil al salón de nuestra casa.